El Germen De La Locura
En los últimos tiempos estamos presenciando acontecimientos que evidencian posibles daños en el raciocinio humano, y juzgo como posibles causas el uso de las altas tecnologías y los dos años de encierro debido a la COVID-19 que nos obligaron a cambiar nuestros estilos de vida, como trabajar y comprar desde el hogar, saludar o conversar con amigos y familiares haciendo uso de las redes sociales, permanecer mucho tiempo solos en el hogar o sin privacidad, la paralización de las actividades de esparcimiento de toda índole y las pérdidas de trabajo.
En estos días se han incrementado los asesinatos de mujeres, los asesinatos múltiples con armas de fuego y hasta padres asesinando a los hijos para hacer sufrir a su pareja. Igual ha ido en aumento la realización de cirugías estéticas y de cambio de sexo, siendo difícil conocer si estamos en presencia de un hombre o mujer por su aspecto físico o quién era el individuo original. Miles de personas, desesperados por su horrible situación de pobreza, se enrolan en viajes inseguros llevando a sus hijos pequeños a buscar nuevas oportunidades, sin pensar que pueden morir en el empeño, entre otras locuras. Ninguna de estas acciones puede ser frenadas con rapidez, ya que dependen enteramente del estado emocional de las personas.
El estado de locura no queda en lo personal, también se ha instalado en las formas de gobernar de los Estados y es tan alarmante que nos puede llevar a un evento bélico de colosales consecuencias para la humanidad, al tratar cada uno de imponer su política, siendo lo más preocupante que ya no contamos con la unidad en los organismos internacionales, la cual en un pasado jugó un papel importante para la paz y la implementación de derechos internacionales. No valoramos que en la unión está la fuerza.
Los medios sociales no se quedan atrás. Comenzaron con excelentes perspectivas, sólo que el germen de la locura se ha instalado en ellos y se publican mentiras descaradamente, con el bello nombre de “memes” se ofende y se critica sin control, se emiten recomendaciones médicas de galenos que pueden que no lo sean, se propaga pornografía y hasta se explica cómo quitarse la vida; cualquier cosa se hace viral.
Todo es mercancía y por lo tanto hacemos cualquier cosa para ganar dinero, justificados por la necesidad de poder ir al supermercado o a cualquier establecimiento para comprar los alimentos, o ser famosos. Los precios suben sin control y como es una economía de mercado, nadie puede tomar medidas de control. Algunos países tienen tanto dinero que parece que lo imprimen y pueden darle ayuda a su población. Los que no tienen recursos están en condiciones críticas y como si fuera un círculo cerrado las poblaciones desean marchar donde dan ayudas, aunque tengan que arriesgar sus vidas.
Por si fuera poco, ya no se respetan a los Presidentes, ni nadie confía en elecciones. Al día siguiente de los sufragios asaltan los Congresos, piden en manifestaciones destituir a los mandatarios o los poderosos dan golpes de Estados duros y blandos. Lo más triste es que en muchas regiones, como si vivieran sin ley, surgen grupos que luchan por el control de territorios para la distribución de drogas, por estatus religiosos o simplemente buscan el poder y poseen mejor armamento que el Ejército Estatal.
Como regalo, los parlamentarios y congresistas de casi todos los países al reunirse para rendir cuentas se ofenden y hasta se van a las manos, y en ocasiones aprueban medidas internas que después ni ellos mismos desean sobre temas como el aborto, la igualdad de género o para imponer sanciones extraterritoriales sin ningún basamento.
Existe bastante locura en todo lo que se invierte en explorar el universo y por los aspirantes a poseer el espacio estelar, mientras millones de personas viven como si no hubiese progresado el mundo y hasta se nos olvida que necesitamos recursos para evitar un cambio climático que nos puede hacer desaparecer, por lo que creo que es obligación de todos cuidar nuestra sociedad y el planeta, ¿no creen?
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